Segismundo presentando su último libro ante un  entregado grupo de Yojarranzers

Mi decálogo

  1. No publico ni pienso publicar reseñas de libros que me parecen de poca calidad, malos o auténticos truños. Nunca he valorado un libro, ni lo pienso hacer, con una estrella o dos, siempre otorgo de tres hacia arriba, si considero que lo merece.
  2. Nunca he usado, ni pienso usar, la Wikipedia o la Inteligencia Artificial para rellenar párrafos de mis libros.
  3. Nunca he comprado seguidores, ni intercambiado reseñas para que mis libros ganen popularidad, ni participado en grupos de apoyo para promocionar mis libros, ni usado ninguna práctica mafiosa para ganar lectores. Tengo mi conciencia bien tranquila, me puedo mirar al espejo cada día y saber que nadie podrá nunca acusarme de algo así.
  4. Cuando he opinado sobre algún tema polémico es porque tengo pruebas, no hablo por hablar ni me meto en jardines. Ya tenemos expertos encargados de la sección de polémicas estériles que no interesan a nadie. Nunca me ha movido ni la envidia ni la frustración, simplemente, no soporto las injusticias ni a la gente que se sirve de triquiñuelas de dudosa moralidad para sobresalir.
  5. No me importa ganarme haters, enemigos o como queráis llamarlo. Prefiero que según que tipo de gente esté en el otro lado, no quiero tener nada que ver con ellos. En ese grupo meto a mafiosos, hezcritores, apoyistas y a gente con menos personalidad que un mejillón (por no hablar de los lameculos).
  6. No me importa que vomiten su bilis o se venguen valorando con reseñas negativas mis libros, no me gano la vida con la escritura, no es mi intención, ni lo ha sido nunca.
  7. Pienso que la gente que tolera las trampas, las mentiras, la falta de ética o las actitudes mafiosas, son de la misma condición. Me remito al punto 5.
  8. Me cuesta tener empatía con según que tipo de personas, de nuevo, véase el punto número 5.
  9. Usar un seudónimo o llevar máscara en los videos no significa que sea un cobarde, simplemente quiero mantener oculta mi identidad, no soy el único. Considero más cobarde ponerse delante de un teclado o de una cámara y emitir juicios de valor con el cerebro lleno de bilis e inquina y no decir a quién van dirigidas las palabras ni la verdadera razón por la que se vierten.
  10. Este punto está de relleno porque es un decálogo y creo que está todo dicho.
© Segismundo Yojarranza
Todos los derechos reservados 2020
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar